No, la verdad es que no. La primera parte del campeonato ha ido muy bien, en algunos circuitos nos ha costado más y hemos sufrido un poco y en otros menos, pero en general creo que hemos hecho un gran trabajo. Las primeras carreras, que eran las que más nos preocupaban porque no tuve pretemporada, las pasamos con buena nota. Las siguientes volvieron a ser difíciles, pero en general creo que tenemos que hacer un balance muy positivo. Además, el anuncio en Mugello de que el año que viene estaré en MotoGP fue una gran noticia para todos, es un sueño que el año que viene se hará realidad y se lo tengo que agradecer al señor Nakamoto.
La repercusión que ha tenido el anuncio de tu futuro en MotoGP y en el Repsol Honda Team, ¿hace sentirte más presionado?
No, tenía y tengo muy claro dónde tiene que estar mi cabeza ahora, que es en Moto2. Con esta repercusión tienes que convivir, es normal que la gente pregunte, que se interese, todo esto es bueno. También es cierto que el jueves de Mugello fue un boom con la prensa, estuve ocupadísimo, pero al final, cuando todo pasó, mi cabeza estaba en Moto2 y tengo muy claro que mi objetivo es ganar este año para subir de categoría habiendo conseguido el título.
¿Qué nota te pones a la primera mitad del campeonato?
Es muy relativo y depende de varias cosas pero, en un global, pondría un 8 o un 8,5, porque aunque hemos hecho muchas cosas bien, hay otras donde hemos fallado un poco y esto hay que mejorarlo. Pero lo importante es que respecto al año pasado, hemos mejorado mucho la regularidad, que es un aspecto muy importante de cara al final del campeonato.
El año pasado la situación era al revés, ibas tú por detrás, recortando. ¿Qué ha cambiado en 365 días?
Básicamente que tengo más experiencia y conozco mejor la categoría. El año pasado a estas alturas tenía cuatro ceros en el casillero y este año sólo uno, y fue en agua, o sea que tenemos que estar contentos pero sin bajar la guardia. Los otros también van muy rápido, como se pudo ver en Mugello. Cuando no me encuentro del todo cómodo con la moto sufro un poco y en una situación así el año pasado me hubiese caído, pero esta vez supe quedar quinto y sumar esos puntos para el campeonato.
Para las carreras que quedan, ¿qué inclinará la balanza para decidir el título?
Depende de muchos factores, de cuántas carreras habrá en agua, cuántas en seco, de los rivales, de los circuitos, de cómo te encuentres encima de la moto.Tenemos que estar contentos porque nos encontramos a 34 puntos por delante en la clasificación y mucho peor sería estar por detrás. Así que es una ventaja que tenemos que saber utilizar en casos en los que no esté listo para luchar por la victoria, pero sin despistarnos porque es una diferencia que en ocho carreras no es nada.
¿Cómo ves a tus rivales? ¿A quién ves más fuerte?
Iannone y Espargaró son los dos que están más fuertes. Iannone es un piloto que cuando tiene el día va muy rápido y Pol [Espargaró] ha sido bastante constante en las últimas carreras, incluso en los entrenamientos. Luthi también es un piloto muy rápido y regular, así que será difícil luchar con ellos.
Dijo Valentino Rossi que una de tus cualidades es que aunque a veces no seas el más rápido, eres capaz de ganar. ¿Es cierto? ¿Cómo se hace eso?
Sí, a veces esto pasa. Puede ser que en un circuito no te encuentres bien y no seas el más rápido ese fin de semana, pero en esos momentos tienes que dar el máximo y saber jugar tus cartas. Hay circuitos que se me dan mejor que otros, grandes premios donde soy el más rápido y otros en los que no, pero en cualquier caso tienes que sacar el 100% de cada situación.
Se apagan los semáforos rojos y se ve una parrilla de salida con Pedrosa, Lorenzo, Rossi, y Marc Márquez. ¿Te lo crees?
[Sonríe] Ahora no pero el año que viene ojalá; si no cambia nada se hará realidad.
Si cierras los ojos, ¿te ves vestido como Stoner y Pedrosa, subido a una MotoGP? ¿Sientes cosquillas en el estómago?
Si te soy sincero ahora no siento nada. Supongo que cuando acabe el último Gran Premio en Valencia y esté a punto de probar la moto, allí sí que tendré cosquillas y nervios, pero ahora tengo muy claro que la cabeza está centrada en Moto2 y el año que viene ya llegará.
